Sandra González
El Buen Tono
Orizaba.- Este 29 de noviembre, Orizaba conmemoró 195 años desde que obtuvo el título de ciudad, una distinción otorgada mediante decreto del Congreso del Estado de Veracruz en 1830. La gestión histórica estuvo encabezada por el padre Manuel María Fernández, quien fungía como senador diputado por el distrito de Orizaba, junto con el diputado secretario José Bernardo Couto. Aquel documento también elevó a rango de ciudad a Xalapa y Córdoba, mientras que Zongolica, San Antonio Huatusco y Coscomatepec fueron reconocidas como villas.
El cronista Armando López Macip destacó que la fecha no sólo invita a celebrar la evolución urbana de Orizaba, sino también a recordar el proceso legislativo que marcó su desarrollo político y administrativo. El decreto, expedido el 29 de noviembre de 1830 y publicado en la Gaceta Oficial el 12 de diciembre de ese mismo año, estableció expresamente que los ayuntamientos no debían erogar fondos municipales para festejar la concesión de estos títulos, una disposición que revela la austeridad ordenada desde entonces.
López Macip afirmó sentirse orgulloso de su identidad orizabeña y de contribuir al avance educativo y cultural de la región desde la filial Veracruz de la Academia Nacional de Historia y Geografía, institución que preside. Su trayectoria como voluntario en el Patronato Amigos del Museo de Arte del Estado, el Patronato del Archivo Municipal y el Club Rotario de Orizaba -que este año llega a su centenario- forman parte de esta labor comunitaria.
El cronista también recordó que en 2016 fue distinguido como Ciudadano Distinguido en el área de Cultura, reconocimiento que, dijo, representa un compromiso permanente con el patrimonio histórico de la ciudad. Su formación académica en la Escuela Modelo Enrique Laubscher, el Tecnológico de Orizaba, el IPN, la UNAM y la Universidad Autónoma de Madrid, así como la fundación de la Orquesta Clásica de Orizaba, complementan su aportación al ámbito cultural.
A casi dos siglos del decreto que transformó la vida administrativa de la región, la ciudad reafirma su vocación histórica y su identidad comunitaria, recordando el legado de quienes impulsaron su consolidación. El documento original, con las firmas de autoridades como Victoriano Sánchez, Manuel María Fernández y Bernardo Couto, constituye hoy un referente para entender el desarrollo político de Veracruz en el siglo XIX.


