De la redacción
El Buen Tono
El gobierno de Estados Unidos informó este martes que aún falta detener a dos de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, después de que Joaquín Guzmán López se declarara culpable de delitos de narcotráfico y crimen organizado.
La fiscal general, Pam Bondi, calificó la declaración de culpabilidad como “una gran victoria contra el Cártel de Sinaloa” y destacó que forma parte de la campaña de Donald Trump para desmantelar las redes de droga. Funcionarios estadounidenses también resaltaron la designación de varios cárteles mexicanos como organizaciones terroristas para frenar el flujo de drogas hacia su país.
“Cayeron dos, siguen dos”, afirmó el fiscal federal Adam Gordon, refiriéndose a Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán, quienes aún son buscados por las autoridades.
Recordemos que Ovidio Guzmán López, otro hijo de “El Chapo”, se declaró culpable en julio de cuatro cargos relacionados con el narcotráfico en un tribunal de Chicago, como parte de un acuerdo con el gobierno estadounidense.
Guzmán López enfrenta cargos de conspiración para tráfico de drogas y participación en empresa delictiva, con penas que van de 10 años de prisión hasta cadena perpetua. Su llegada a Estados Unidos en 2024, junto a Ismael “El Mayo” Zambada, levantó sospechas de un posible engaño hacia Zambada, quien en agosto también se declaró culpable de cargos de narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas en Nueva York.


