Agencias
Panotla, Tlaxcala.- Un caso que ha conmocionado a la comunidad terminó con la condena de Avimael “N”, quien fue sentenciado a 66 años y ocho meses de prisión por el asesinato de su propia madre, tras salir de un centro de rehabilitación donde intentaba superar sus adicciones.
Según las autoridades, la mujer decidió sacar a su hijo del anexo preocupado por las condiciones en las que vivía, sin imaginar que esta decisión le costaría la vida. Pocos días después, Avimael “N” discutió con su madre dentro de su hogar y, en un acto de violencia extrema, la estranguló.
La hermana del acusado descubrió el cuerpo debajo de una cama. La escena era escalofriante: las paredes del domicilio estaban cubiertas de insultos y en el patio había una tumba improvisada, evidencia de la violencia que había ocurrido. Inmediatamente dio aviso a las autoridades locales, quienes aseguraron la zona y comenzaron la búsqueda del agresor.
Avimael “N” había huido al estado de Guanajuato, donde finalmente fue localizado y aprehendido por las fuerzas de seguridad. Los hechos, ocurridos en 2023, culminaron dos años después con la vinculación a proceso por feminicidio y la posterior sentencia que incluye, además de la prisión, una multa económica.
Este caso ha puesto en evidencia la complejidad del manejo de adicciones y los riesgos asociados cuando la violencia familiar se cruza con problemas de salud mental y dependencia. Las autoridades de Tlaxcala recalcan la importancia de la prevención y la intervención temprana en casos similares para evitar tragedias.


