Adriana Estrada
El Buen Tono
Orizaba.- Aunque la temporada decembrina traerá una reactivación económica de entre tres y cuatro semanas, vendrá seguida por una “cuesta de enero” particularmente ardua y por consiguiente un inicio de 2026 complicado, especialmente para el sector industrial y las pequeñas y medianas empresas, advirtió Octavio Gracián Malpica, vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en Orizaba.
En un balance sobre el cierre de 2025 y las perspectivas para el próximo año, explicó que, en diciembre, se genera una reactivación al 30 % en las ciudades, impulsada por el regreso de familias y turismo de visita, más que por el hospedaje formal.
Sin embargo, luego de ese pequeño “respiro” económico llega la cuesta de enero, y con ella, la cascada de aumentos en costos y una presión fuerte para cumplir con las obligaciones que debe enfrentar el sector empresarial y comercial.
Refirió que, el panorama para el primer trimestre de 2026 será complicado, con una presión fuerte, por lo que como empresarios se deben preparar para lograr una sostenibilidad del empleo formal.
Indicó que se viene el alza al salario mínimo, generando el incremento en la informalidad y un reajuste de personal, ante el “ahorcamiento” que se podría dar a las Pymes, ya que no muchos pueden aguantar la carga, especialmente en los primeros dos años de su apertura.
Sin una estrategia integral que considere la capacidad de absorción de las empresas, especialmente las más pequeñas, 2026 iniciaría con una oleada de ajustes, presiones financieras y un debilitamiento productivo.


