AGENCIA
Internacional.- Fuerzas estadounidenses abordaron este domingo el buque petrolero Bella-1 cuando se dirigía a la costa de Venezuela, actualmente bajo un bloqueo marítimo establecido por el Ejército de Estados Unidos. Se trata de la tercera incursión de este tipo en las inmediaciones de aguas venezolanas en lo que va del mes, de acuerdo con reportes de agencias internacionales.
El Bella-1 se encuentra bajo sanciones de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos desde junio de 2024. El buque, de bandera panameña, está vinculado a la empresa Louis Marine Shipholding Enterprises, señalada por Washington de mantener relaciones con la Guardia Revolucionaria de Irán.
Según la orden de sanciones, dicha compañía habría “asistido, patrocinado o proporcionado apoyo financiero, material o tecnológico” a esa fuerza iraní. Fuentes citadas por la agencia Bloomberg indicaron que el petrolero realizaba maniobras de aproximación a la costa venezolana para cargar crudo al momento de la intervención.
Esta acción se suma a otros dos abordajes realizados por fuerzas estadounidenses en días recientes: el petrolero Skipper, interceptado el pasado 10 de diciembre, y el Centuries, abordado durante la noche del sábado a este domingo.
El Gobierno de Venezuela condenó estas incursiones y las calificó como un “robo” de activos y un “secuestro” de tripulaciones, al considerar que se llevaron a cabo en aguas internacionales. En un comunicado emitido tras el abordaje del Centuries, el Ejecutivo de Nicolás Maduro acusó a Estados Unidos de cometer actos de “piratería” que violan el Derecho Internacional.
Las autoridades venezolanas advirtieron que ejercerán “todas las acciones correspondientes” para que estos hechos no queden impunes, entre ellas la presentación de denuncias ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y otros organismos internacionales.
El presidente Nicolás Maduro calificó este domingo las confiscaciones como “piratería de corsarios” y aseguró que Venezuela lleva semanas denunciando lo que considera una campaña de agresión que incluye acciones militares contra petroleros. No obstante, afirmó que su gobierno está preparado para responder y continuar con su proyecto político.
En el plano económico, analistas consultados por la agencia Reuters advirtieron que las incautaciones elevan los riesgos geopolíticos y podrían impactar en los precios del petróleo. Giovanni Staunovo, analista de UBS, señaló que el mercado podría interpretar estas acciones como una escalada, con más barriles venezolanos en riesgo.
Otros especialistas advirtieron que estas medidas podrían aumentar la tensión en la llamada flota en la sombra que transporta petróleo de países sancionados como Venezuela, Rusia e Irán, además de sentar precedentes que animen a otros actores internacionales a realizar acciones similares.
De acuerdo con analistas del sector energético, la producción de petróleo en países bajo sanciones ya muestra señales de desaceleración, lo que podría derivar en mayores descuentos del crudo y en un encarecimiento de la logística, con efectos mixtos sobre los precios internacionales del energético.


