AGENCIA
Nacional.- Al cumplir hoy dos años de su relanzamiento, Mexicana de Aviación enfrenta un panorama operativo y financiero complejo, marcado por una baja ocupación promedio en sus vuelos y una fuerte dependencia de recursos públicos para mantener sus operaciones.
De acuerdo con datos del sector aeronáutico, la aerolínea estatal registra una ocupación cercana al 44 por ciento en sus aviones, un nivel considerablemente inferior al promedio de la industria aérea comercial, que suele ubicarse por arriba del 70 por ciento. Esta baja demanda ha limitado su capacidad para alcanzar los objetivos de pasajeros planteados desde el inicio del proyecto.
Especialistas coinciden en que, bajo las condiciones actuales, Mexicana de Aviación requiere alrededor de 2 mil millones de pesos anuales en subsidios para poder sostener su operación. Factores como la limitada red de rutas, la ausencia de vuelos internacionales rentables y los costos operativos han impactado su desempeño financiero.
Otro elemento señalado es la base de operaciones en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, cuya conectividad aérea y terrestre continúa siendo un reto para atraer a un mayor número de pasajeros, especialmente frente a la competencia de aerolíneas privadas ya consolidadas.
A dos años de su regreso, la situación de Mexicana ha reavivado el debate sobre la viabilidad del modelo de una aerolínea estatal subsidiada y el uso de recursos públicos para sostenerla. El futuro de la empresa dependerá de su capacidad para incrementar la ocupación de sus vuelos, mejorar su eficiencia operativa y redefinir su estrategia comercial en un mercado altamente competitivo.
Imaginen si esos 3.4 millones diarios (mil 241 millones en un año) se destinaran a comprar medicamentos, habría muchos mexicanos beneficiados.
La realidad es que no hay economía que soporte otros seis años de estas estupideces, es por eso que
Morena quiere cambiar las leyes para perpetuarse en el poder, sabiendo que en cuanto el dinero de las limosnas del bienestar se acaben, los paleros atooizados dejarán de votar por ellos.
Es curioso que alguien que en su vida ha tenido una empresa o ha trabajado y sea de izquierda, quiera, de pronto, ser emprendedor con dinero público, eso sí.
