A días de concluir el mandato, la dependencia municipal no atendió la explotación infantil ni la violencia, a pesar de recibir recursos públicos año con año
José Juan
El Buen Tono
Córdoba, Ver.- A lo largo de estos cuatro años, el Ayuntamiento de Córdoba destinó al DIF recursos cercanos a 2 millones de pesos año con año, pero la dependencia nunca implementó acciones efectivas para erradicar la explotación infantil ni prevenir la violencia contra menores. El dinero público se aprobó y ejerció, pero los resultados brillan por su ausencia.
Durante toda la administración, el personal del DIF fue sometido a explotación laboral bajo la dirección de María Elena Yunes Choperena, mientras la dependencia se limitaba a eventos simbólicos y programas superficiales que no tuvieron impacto real en la protección de la infancia. La corrupción de la dependencia permitió que los menores continuaran expuestos a riesgos graves en calles y comercios de la ciudad.
Los recorridos de supervisión que debieron realizarse a través de DAPRIA nunca se llevaron a cabo, y no existen informes públicos que demuestren siquiera un intento de intervención. Cada peso aprobado año con año quedó sin reflejarse en acciones concretas, lo que genera cuestionamientos sobre el destino real de los recursos.
Para el ejercicio fiscal 2025, el Cabildo aprobó nuevamente la ministración anual al DIF por 2 millones 850 mil pesos, monto que debía traducirse en medidas efectivas para proteger a la infancia y a las familias más vulnerables.
