De la redacción
El Buen Tono
A los 32 años, cuando muchas carreras profesionales ya han tomado un rumbo definitivo, Nick Torres vuelve a abrir una puerta que parecía cerrada. El Jugador Más Valioso de la temporada 2025 en la Liga Mexicana de Beisbol firmó contrato con los Yankees de Nueva York, una de las organizaciones más influyentes del deporte profesional, en un movimiento que recompensa años de insistencia lejos de los reflectores de Grandes Ligas.
La historia de Nicholas Cawley Torres no es la del talento precoz que irrumpe de inmediato en la gran carpa. Es la de un bateador que tuvo que reconstruir su carrera. Seleccionado en el draft colegial de 2014 por los Padres de San Diego, pasó varios años en el sistema de ligas menores, alcanzando el nivel Triple A sin lograr el ansiado debut. En 2018, tras llegar a los Rangers de Texas, el panorama no cambió y su camino dentro del beisbol organizado parecía agotarse.
Fue entonces cuando México se convirtió en el punto de inflexión. En 2019, Torres arribó a la Liga Mexicana de Beisbol con los Pericos de Puebla, donde comenzó a reencontrarse con su ofensiva. Sin embargo, el verdadero despegue llegó a partir de 2021 con los Algodoneros del Unión Laguna, una etapa que redefinió su perfil como bateador de impacto.
Durante cinco temporadas en Torreón, Nick Torres fue sinónimo de producción constante. En ese periodo dejó un promedio de bateo de .342, conectó más de 16 cuadrangulares por campaña y produjo 63 carreras, cifras que lo colocaron entre los ofensivos más confiables del circuito. En total, disputó 389 juegos con el jersey guinda, convirtiéndose en una referencia para la alineación y en uno de los nombres más reconocibles de la franquicia.
La temporada 2025 terminó por cerrar el círculo. Su rendimiento sostenido lo llevó a conquistar el MVP de la LMB, un reconocimiento que volvió a poner su nombre en el radar internacional y que ahora se traduce en una nueva oportunidad con los Yankees, una organización que históricamente ha apostado por jugadores con experiencia y carácter competitivo. A ello se sumó un desempeño destacado en playoffs, donde conectó dos jonrones walkoff en la misma serie, quedándose a un juego de avanzar a la final de la Zona Norte.
En el aspecto contractual, los Algodoneros del Unión Laguna conservarán los derechos de retorno del jugador, lo que mantiene abierta la posibilidad de verlo nuevamente en el circuito de verano con ese jersey.
Más allá del contrato, el caso de Nick Torres confirma que el camino al máximo nivel no siempre es lineal. A veces implica reinventarse, dominar otros escenarios y esperar el momento exacto para volver a intentarlo. Hoy, ese momento ha llegado en uno de los escenarios más exigentes del beisbol mundial.
