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En la cárcel, aprendí de los buenos: Mateos

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Orizaba.- Luego de siete años con 11 meses, de cumplir una condena que ascendía a los 65 años de cárcel por plagio y homicidio que no cometió, Miguel Ángel Mateos Escamilla fue absuelto por el Segundo Tribunal Federal Colegiado en materia penal con un fallo de libertad inmediata.

En exclusiva para EL BUEN TONO señaló que a pesar de las circunstancias vividas ha perdonado a las personas que lo señalaron, “sí los perdonó, desde la primera semana, desde ese momento recuerdo me quité todos esos odios, nunca generé ningún odio, nunca tuve un sentimiento negativo hacia esas personas, fue como si las hubiera eliminado, no estaba en mi mente, no quiero sentir eso, no cargué con ese tipo de rencores”.

Durante su estancia en el Centro de Readaptación Social La Toma, en el municipio de Amatlán de los Reyes, aseguró que aprendió de los buenos y también difíciles momentos que experimentó al interior del lugar, pues tuvo que habituarse a ese tipo de vida.

Abundó que el apoyo familiar fue fundamental para pasar esta difícil prueba, ya que confiaban en su inocencia, “no es fácil adaptarse a ese mundo, a ese pequeño mundo, siempre dije que yo no pertenecía ahí, estaba depositado, hay que adaptarse”.

Cabe recordar que fue hasta el pasado viernes que a Mateos Escamilla lo absolvieron de dichos delitos, tras el secuestro y asesinato de Karina Reyes Luna, por lo que de forma inmediata fue recibido al salir, por sus familiares.

“Fue una gran alegría ver a mi familia esperándome, se logró algo que se estaba esperando desde hace mucho tiempo, siempre se confió en que se iba a lograr, costaba a veces trabajo aceptar la realidad, ¡se logró!, esas fueron mis primeras palabras al salir del reclusorio, no soy tan expresivo, pero en mi interior, sí estaba demasiado contento”, dijo en la primera charla emitida a un medio de comunicación, después de haber salido de la prisión.

A lo largo de los años dentro del penal, se dedicó a la elaboración de pinturas y artesanías con madera, trabajo mediante el cual obtenía recursos para apoyar a su familia desde el interior; finalmente comentó que ha concluido un difícil capítulo de su vida y está seguro que se avecinan proyectos a futuro que deberá analizar para impulsar su camino, después de permanecer en la cárcel cerca de ocho años.

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