Maltrata.- La producción de tabiques y ladrillos que durante años fue un negocio exitoso, actualmente enfrenta una severa crisis, porque de 100 empresas que había se redujeron a 30, reconoció el alcalde Mario Rosas Garcés.
Explicó que enfrentan problemas económicos que se derivan de los cambios climáticos que afectan la producción del campo, además de que los avances en la industria de la construcción ocasionan que las tabiqueras casi desaparezcan.
“La elaboración de ladrillos desde la década de los 90’s hacia atrás, significaba una alta productividad de la que vivieron cientos de familias, pero al paso del tiempo la situación cambio para perjuicio de quienes se dedican al ramo”, expresó.
Reconoció que en antaño existían poco más de 100 negocios de este giro, pero ahora sólo persisten 30 debido a las bajas ventas y a la escasez del barro.
“Cerraron poco a poco, al año se vinieron abajo entre 10 a 15 tabiqueras a partir del 2009”, remarcó.
Explicó que otro factor que influyó en la desaparición del giro fueron las largas y pesadas jornadas laborales que realizaban los trabajadores sin contar con prestaciones, por lo que muchos decidieron buscar otros trabajos en la región o en los Estados Unidos.
Al caminar sobre la entrada del municipio únicamente se pudo apreciar que los sitios de fabricación de ladrillos lucen vacíos, sin clientes y sin trabajadores.
Carlos Guevara
El Buen Tono
