

Córdoba.- Un grupo de trabajadores de la Secretaría de Salud, adheridos al programa del Seguro Popular, protestaron ayer por su presunto despido, aun cuando muchos cuentan con contratos, luego de que fueran cerradas las oficinas donde venían laborando, en el Hospital General Córdoba. Ayer Cientos de beneficiarios se quedaron sin servicio.
Así lo dieron a conocer los empleados de la SSA, José Pablo Juárez Díaz y Gustavo Mendoza Andrade, quienes denunciaron que durante el pasado fin de semana, personal de la Jurisdicción Sanitaria Número 6 de Córdoba, acudió al módulo donde laboran, para colocar candados en la puerta y posteriormente cambiar la chapa, por lo que ya no pudieron ingresar al local, donde se encuentra el equipo que está a su cargo, así como objetos personales. Indicaron que en Córdoba son seis los trabajadores afectados, pero en la Entidad suman alrededor de 600.
Explicaron que han trabajado varios años, tramitando el Seguro Popular para las personas que vienen a solicitar el beneficio, pero ayer los beneficiarios resultaron afectados, pues el Hospital les negó el servicio, y al no estar al corriente en sus trámites, deben pagar.
