Amatlán.- La mañana de ayer, el cuerpo de Pedro Orozco Rodríguez —de 26 años y operador del taxi 56 de Yanga—, quien se encontraba desaparecido desde la tarde del lunes, luego de que tres hombres armados lo abordaran y le pidieran un viaje a Atoyac.
El cadáver mostraba señales de violencia y dos disparos por arma de fuego. Fue encontrado entre unos cañales de la congregación Potrero Viejo, camino a La Concha, a las 09:15 horas por un grupo de campesinos y familiares que desde temprana hora había iniciado su búsqueda, según informes policiacos.
Elementos de la Policía Municipal acudieron al sitio luego de ser alertados del hallazgo por medio de una llamada al número de Emergencias 911. Los uniformados acordonaron el área al arribar al sitio, preservando la escena según el protocolo de cadena de custodia.
Más tarde, efectivos de la Policía Estatal y Federal arribaron para implementar un operativo de seguridad en la zona y cerrar totalmente el acceso vehicular al camino Potrero Viejo-La Concha.
En el sitio, los consanguíneos del trabajador del volante lamentaron su muerte y la forma en que éste fue asesinado, señalando a la Policía que el joven alcanzó a pedir auxilio vía telefónica, pero que ninguna corporación se prestó a salvarlo de sus verdugos.
Luego, peritos en Criminalística llegaron al sitio para realizar una inspección ocular y asegurar cualquier indicio. En tanto, el Fiscal en turno tomó conocimiento de los hechos e integró una Carpeta de Investigación. Posteriormente, se ordenó el levantamiento de los restos y su traslado a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo) para la necropsia de Ley.
