

La representación de la Pasión de Cristo suele realizarse a lo largo de ocho barrios de la alcaldía de Iztapalapa, en el oriente de Ciudad de México, y regularmente acuden miles de personas que se aglomeran por todas las calles. Este año las autoridades de la capital decidieron suspenderla para evitar la propagación del coronavirus.
La representación, a la que se calcula que acudieron dos millones de personas el año pasado, se realizó esta vez en el atrio del Santuario de Nuestro Señor de la Cuevita, en un espacio al aire libre con un número de actores reducido y que fue transmitido por internet y el sistema público de televisión de la capital.


