

Córdoba.- El que no haya mercancía en los mercados, provoca que la gente no acuda a falta de atractivos, generando un círculo vicioso de falta de movilidad como ocurre en el Mercadito Tratados de Córdoba y en La Isla, donde hay locales abandonados, por ello, se prevén estrategias para reactivarlos a futuro.
El regidor noveno, Rodolfo Cordera Perdomo, informó que al tener más de 70 locales abandonados, en el “Mercadito”, se requiere de una remodelación y proyección para reactivar el movimiento económico en su interior, pues las islas están desoladas y eso ha provocado incluso que haya inseguridad en el interior.
Aunque reconoció que “el Mercado Tratados de Córdoba, desde que se construyó no pegó”, y a la larga los vendedores empezaron a abandonarlo, finalmente los comerciantes han ido y venido, han tratado de hacerles varias cosas al zoco y sigue sin funcionar.
Entre los intentos de mejorar la actividad económica, se acomodaron algunas fondas, se construyeron varios locales que quedaron incompletos en la parte frontal y que nadie usa, también le podría dar un tipo de vida al mercado en general, si fueran ocupados.
Cordera Perdomo indicó que en algún momento los comerciantes pidieron que se les pusiera un semáforo en la avenida Miguel Alemán, porque la gente peligraba para cruzar la avenida. “El semáforo ya existe desde hace ocho años, sin embargo, no se reactivó la afluencia de clientes”.
Los locales comerciales que están inconclusos en la parte frontal del zoco, donde se reubicarían a los floristas, tiene un problema legal, “se reportaron como terminados en la administración anterior y no es así, el Ayuntamiento no le puede invertir dinero, porque se reportó como obra terminada”, mientras no se resuelva esa situación, el que abrieran pudiera servir para mejorar la actividad dentro del Mercadito.
El funcionario comentó que aunque la direcciones de Desarrollo Económico y Obras Públicas se han reunido para hacer una propuesta de una remodelación del Mercadito, su perspectiva es diferente.
“Mi opinión es que más que una remodelación física, hace falta una remodelación mental, para que se oferten más productos, porque si no hay ofertas no van los clientes y se vuelve un círculo vicioso de que no van al mercado porque no hay mercancía y no la hay porque no va gente”.
No es fácil cambiar los hábitos de la población que por tradición van a un solo lugar a comprar, esas situaciones se deben analizar y perseverar porque el que constantemente cierren los vendedores, entonces nunca tendrán éxito.
Sofía Dorantes Chávez
El Buen Tono
