

Fortín.- La serie de manifestaciones que se han generado en los últimos días, es para la iglesia católica un símbolo del hartazgo social, y aún cuando se manifestó en acuerdo, lo que no se aprueba son las expresiones desbordadas que podrían considerarse como vandálicas, indicó Jorge Montero Díaz, sacerdote de la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús en Fortín.
A su consideración, los hechos en Guerrero despertaron al país, que se estrena en la democracia, pues ha dejado de ser “pueblo de borrego” y pasó a ser un pueblo que toma conciencia a tal grado que ha decidido expresarse, apuntó el presbítero.
Sin embargo, reprobó que esta expresión del pueblo, que ha pedido “un ya basta”, se esté confundiendo con una expresión “desbordada”, con aquellas manifestaciones que incluso puedan considerarse vandálicas.
Como ejemplo, citó los ataques en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) que fueron protagonizados por una persona ajena a la Máxima Casa de Estudios.
Celia DÌaz GarcÌa
El Buen Tono
