Nayeli Ríos
El Buen Tono
Córdoba.- A unas horas de que venza el plazo para que los partidos políticos realicen modificaciones en sus planillas rumbo a la próxima administración municipal, personajes señalados por su nulo trabajo, excesos dentro del servicio público y vínculos polémicos, buscan mantenerse en la nómina gubernamental. Entre ellos se encuentran Lourdes Juárez Lara, Xavier Ramos Bozziere, Denisse Lira Tosqui y Jorge López Tress, quienes pretenden colarse en la comuna que entrará en funciones el 1 de enero de 2026.
Lulú Juárez, conocida por su gris desempeño como diputada local —donde fue señalada de acudir al Congreso sólo a dormir y cobrar—, ahora busca una regiduría en el ayuntamiento de Córdoba. Su paso por el Poder Legislativo se caracterizó por la falta de iniciativas, ausencia en temas relevantes y total desconexión con la ciudadanía. Actualmente ocupa una dirección en la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), sin que se haya aclarado si pidió licencia o continúa cobrando de manera simultánea.
Xavier Ramos Bozziere, líder del sindicato Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), también aspira a un espacio en la próxima comuna. Su trayectoria ha estado marcada por el clientelismo, el uso de estructuras sindicales para fines políticos y su cercanía con grupos de poder que le han permitido ocupar distintos cargos, pese al evidente rechazo social.
También figura Denisse Lira Tosqui, ex directora de Educación, Cultura y Deporte durante el primer año de la actual administración, quien fue despedida por malos resultados. De acuerdo con información recabada, tendría asegurada una regiduría, pese a su historial de ineficiencia.
En esa misma línea aparece Jorge López Tress, actual coordinador de Desarrollo Social, quien en el gobierno de Leticia López Landero fue titular del área educativa y cultural, sin dejar resultados destacables. Además, es primo de Samir Tress, abatido en un centro nocturno, lo que ha generado cuestionamientos sobre su entorno. Hoy busca reciclarse políticamente mediante acuerdos partidistas, sin respaldo ciudadano.
