AGENCIA
Washington, D.C.- La política arancelaria impulsada por Donald Trump ya muestra efectos visibles en la economía de Estados Unidos: las importaciones de bienes y servicios registraron una caída histórica de 16.31 por ciento (%) en abril de 2025, la mayor desde que se tiene registro, revelaron datos del Departamento de Comercio y la Oficina de Análisis Económico (BEA).
En términos absolutos, la caída fue de 68,404 millones de dólares respecto a marzo, reduciendo el valor total de las importaciones a 351 mil millones. La baja se debió principalmente a un desplome de 19.87% en las importaciones de bienes -equivalente a 68 mil 933 millones- mientras que las importaciones de servicios crecieron ligeramente un 0.73%, es decir, 529 millones.
Según Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, este contraste refleja una posible desaceleración en la demanda de productos físicos, mientras el consumo de servicios se mantiene relativamente estable.
Este ajuste en las importaciones se da en un contexto donde las exportaciones aumentaron 2.95%, lo que representa 8 mil 296 millones adicionales. En detalle, las ventas al exterior de bienes crecieron 3.38% y las de servicios un 2.14%, acumulando así cuatro meses consecutivos de crecimiento exportador.
Como consecuencia, la balanza comercial estadounidense cerró abril con un déficit de 61 mil 617 millones de dólares, una reducción del 55.45% mensual, el menor saldo negativo desde septiembre de 2023. Este resultado fue mejor a lo anticipado por los analistas, que esperaban un déficit de 68 mil 590 millones.
En cuanto a socios comerciales, México se consolidó como el principal aliado de EU entre enero y abril de 2025, con una participación del 14.7%, seguido por Canadá (13.7%) y China (8.1%), de acuerdo con la OCDE.
Sin embargo, la caída en las importaciones estadounidenses podría tener efectos adversos para México, particularmente en el sector manufacturero y las cadenas de suministro del T-MEC. Según la OCDE, esto podría traducirse en menos pedidos, menor rotación logística y presión sobre zonas industriales exportadoras.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha advertido que una baja sostenida en la demanda externa podría impactar el crecimiento económico de México, especialmente si se combina con otros factores como inflación interna o tensiones comerciales bilaterales.
La tendencia podría mantenerse si no se revierten las restricciones arancelarias y las condiciones logísticas internacionales, advirtieron analistas.
