

De la redacción
El Buen Tono
Córdoba.- Carlos Vergara Islas, conocido en redes sociales como “pseudohistoriador”, continúa burlándose de las autoridades pese a las carpetas de investigación en su contra por violencia contra mujeres. A la fecha, no se han registrado avances significativos en los procesos legales, lo que ha generado indignación entre activistas y víctimas que claman justicia.
Pero más allá de las denuncias por agresiones, Vergara Islas también ha sido exhibido como un vividor que se ha aprovechado de recursos públicos y de espacios culturales sin ningún tipo de control legal. Fue uno de los principales beneficiarios de la administración de Leticia López, quien lo tenía entre sus consentidos y lo impuso como supuesto “asesor cultural”, cargo por el que llegó a facturar más de 250 mil pesos en un solo año.
Carlos Agustín Vergara es un falso historiador y un falso periodista. Así lo demuestra el Registro Nacional de Profesionistas, donde no aparece ningún título que lo acredite ni como comunicólogo ni como historiador. En el mejor de los casos, podría tratarse de un pasante, pero ha usurpado ambas profesiones para vivir del chantaje y la ilegalidad.
Junto con su pareja sentimental, y escudándose en un grupo feminista, mantienen invadido el inmueble conocido como el Patio de La Estrella, el cual han convertido en su negocio personal sin contar con los permisos correspondientes. Irónicamente, desde su página “Periodistas Multimedios” lanza ataques contra el comercio informal, él mismo y su pareja ocupan el espacio público frente al Museo de la Ciudad con un puesto de crepas sin licencia municipal.
