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Ciudad de México — Un nuevo y contundente golpe al crimen organizado fue anunciado este domingo por el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, quien reveló la desarticulación de una de las principales redes dedicadas al robo de combustible —huachicol— en el centro de México. El operativo, que se desarrolló de forma simultánea en varios municipios de tres estados, culminó con 32 detenidos, la incautación de casi 16 millones de pesos, decenas de vehículos decomisados, así como el rescate de animales exóticos.
Acompañado del fiscal general, Alejandro Gertz Manero, y de los titulares de la Defensa Nacional, Marina y la Guardia Nacional, Harfuch explicó que la organización criminal perforaba ductos de Pemex en el Estado de México, Hidalgo y Querétaro para extraer gasolina y gas LP. El combustible era almacenado en bodegas y posteriormente distribuido a través de una red ilegal que incluso abastecía a gasolineras. Además, algunos integrantes falsificaban documentos y mantenían vínculos con autoridades locales para facilitar sus operaciones.
“La desarticulación de estas redes no solo afecta sus capacidades operativas y financieras, sino que reafirma el compromiso de este Gobierno contra la impunidad”, subrayó Harfuch, quien destacó la captura de los dos principales líderes del grupo: Cirio Sergio N y Luis Miguel N, alias ‘El Flaco de Oro’.
Pese a las insistentes preguntas de la prensa, ni Harfuch ni Gertz precisaron si entre los coludidos hay funcionarios de corporaciones estatales o federales. El fiscal se limitó a destacar la cobertura territorial del operativo, que incluyó 12 cateos simultáneos en municipios como Ixtlahuaca, Polotitlán, Huehuetoca y Jilotepec (Estado de México), Tlalpan (Ciudad de México) y Querétaro capital.
El despliegue permitió la incautación de 21 tractocamiones, 14 semirremolques, ocho camiones cisterna, un tanque estacionario de 27 metros de largo y 48 vehículos, algunos de ellos blindados y de lujo, reflejando la magnitud de las operaciones criminales.
Este caso se suma a otros golpes recientes contra el huachicol, como la intercepción en marzo de un buque en un puerto de Tamaulipas con 10 millones de litros de combustible ilegal. Según especialistas, el robo de combustible genera pérdidas anuales al Estado mexicano por 177 mil millones de pesos, equivalentes a 9,200 millones de dólares.
