Durante su conferencia matutina de este viernes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, lanzó una crítica directa a la política estadounidense en su combate contra el crimen organizado. La mandataria reprochó la incongruencia del gobierno de Estados Unidos, que por un lado califica a las organizaciones criminales mexicanas como terroristas, y por otro, negocia judicialmente con sus líderes.
Sheinbaum hizo referencia al caso de Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, quien enfrentará este 11 de julio una audiencia clave en la Corte del Distrito Norte de Illinois. “Estados Unidos declara a estas organizaciones como terroristas, pero negocia con sus cabecillas. ¿Dónde queda entonces su política de no trato con terroristas?”, cuestionó.
🧾 Proceso judicial en curso
Guzmán López fue extraditado a Estados Unidos en septiembre de 2023. Aunque inicialmente se declaró no culpable, recientemente aceptó cargos de narcotráfico y asociación delictuosa, pidiendo concentrar su juicio en Illinois, donde también enfrenta acusaciones en Nueva York y el Distrito de Columbia.
La presidenta aseguró que el gobierno mexicano no tiene conocimiento oficial del acuerdo judicial que habría firmado el acusado con autoridades estadounidenses, y subrayó que cualquier implicación de ciudadanos mexicanos durante el juicio deberá ir acompañada de pruebas formales ante la Fiscalía General de la República (FGR).
🔒 Sin refuerzo militar en Sinaloa
Pese a la expectativa por el juicio, Sheinbaum descartó un aumento en el despliegue de seguridad en Sinaloa. Indicó que se mantendrá la coordinación con las fuerzas federales y locales, sin medidas extraordinarias por el proceso judicial en EE. UU.
“Si hay imputaciones en México, tienen que venir con pruebas”, remarcó la presidenta.
Este posicionamiento marca uno de los primeros momentos de tensión diplomática bajo el nuevo gobierno, abriendo el debate sobre la forma en que ambos países enfrentan el crimen organizado transnacional.
