


De la Redacción
El Buen Tono
Atoyac.- En el municipio, la obra pública es inexistente, por la omisión que también es corrupción, del alcalde, Carlos Alberto Ventura de la Paz.
En estos ya casi cuatro años, la localidad se desmoronó entre baches, lodo y abandono.
Calles intransitables, caminos rurales olvidados y colonias que reclaman lo mínimo: atención.
Pero, desde el Palacio Municipal no hay respuesta. Ni un sólo proyecto relevante, ni una obra que justifique el gasto público.
Mientras otros municipios al menos intentan gestionar recursos, en Atoyac no hay ni intención.


