Un estudio científico de gran escala ha confirmado el inmenso impacto de las vacunas contra el SARS-CoV-2 entre 2020 y 2024: evitaron 2.533 millones de muertes en todo el mundo, lo que equivale a una vida salvada por cada 5,400 dosis administradas. La investigación, publicada en la revista Jama Health Forum, fue liderada por expertos de la Università Cattolica del Sacro Cuore de Roma y la Universidad de Stanford en Estados Unidos.
La mayoría de las vidas salvadas —82%— corresponden a personas vacunadas antes de contraer el virus, y más de la mitad (57%) se produjeron durante el periodo dominado por la variante ómicron. Los adultos mayores fueron quienes más se beneficiaron: el 90% de las muertes evitadas fueron de personas mayores de 60 años.
Además, el equipo liderado por la profesora Stefania Boccia calculó que gracias a las vacunas se preservaron 14.8 millones de años de vida, lo que significa que por cada 900 dosis administradas, se ganó un año completo de vida.
“Este estudio es el más completo hasta ahora: cubre el periodo de ómicron, se basa en datos globales y utiliza menos suposiciones que investigaciones anteriores”, destacó la profesora Boccia.
Los investigadores emplearon datos demográficos mundiales y métodos estadísticos avanzados para comparar el impacto de la pandemia con y sin vacunas. Descubrieron que el grupo más protegido fueron los mayores de 60 años (con 76% de los años de vida ganados), mientras que niños, adolescentes y adultos jóvenes contribuyeron con menos del 1% al total de vidas salvadas.
“Aunque estas cifras son más conservadoras que otros estudios previos, demuestran un beneficio innegable a nivel global, especialmente en la población más vulnerable”, concluyó el investigador Angelo Maria Pezzullo.
Este trabajo no solo resalta el valor de la vacunación en la pandemia, sino que también ofrece una mirada detallada sobre quiénes se beneficiaron más y cómo se distribuyeron esos beneficios en términos de edad, periodo epidemiológico y condición previa a la infección.
