


Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- Tras el anuncio municipal de un programa de bacheo, la ciudadanía ha respondido con un contundente mapeo del caos y abandono vial. Decenas de reclamos en redes sociales exhiben la brecha entre el discurso oficial y la realidad de calles desgarradas en múltiples puntos de la ciudad.
Las autoridades destacan inversiones de 8 millones de pesos en rehabilitación asfáltica, y es que la administración, en su ocaso, intenta remendar un problema estructural acumulado por años, con recursos insuficientes y acciones percibidas como cosméticas.
La crítica ciudadana no se limita a señalar huecos aislados, sino a documentar un colapso vial sistémico. Vecinos enumeran avenidas críticas como la 12 en la colonia México, la 16 en calle 4, la 37 en Valle del Sol que conecta con La Alianza, y la 44 en Carriles, todas con deterioro severo.
En San Miguelito, la entrada de El Trébol y el bulevar de Buena Vista presentan baches “del tamaño de cráteres”. La ironía es palpable en San Dimas: allí, habitantes repararon por meses una calle destruida, sólo para que el municipio rompiera su trabajo reciente y lo “rehiciera” como obra propia.
El contexto oficial revela la desproporción entre necesidades y recursos. Los 8 millones asignados, repartidos en 2 contratos de licitación restringida, apenas cubren parches en “tramos aislados” de zonas específicas, dejando fuera a comunidades rurales como Millán, Los Mangos o Berlín, donde vecinos han tenido que rentar maquinaria o invertir ahorros familiares en reparaciones de emergencia.
Colonias urbanas como Filtros, Anturios y Villa Rica permanecen igualmente ignoradas, pese a protestas como la del parque 21 de Mayo, donde se exigió pavimentación en avenida 34 y calle 20.
Lo más revelador es el cronograma de estos contratos: firmados en marzo de 2025 con vigencia hasta julio del mismo año, su ejecución coincide con el tramo final de la administración municipal. Este dato alimenta la percepción ciudadana de que se trata más de un gesto de despedida que de una política sostenida.


