AGENCIA
Salt Lake City.- Una intensa persecución se desplegó el jueves en Utah luego del asesinato del activista conservador Charlie Kirk, de 31 años, quien fue abatido de un disparo en el cuello mientras participaba en un acto en la Universidad de Utah Valley, en Orem. El hecho, ocurrido al mediodía del miércoles frente a unas 3 mil personas, fue calificado por el gobernador Spencer Cox como un “asesinato político”.
Kirk, comentarista de pódcast y radio, así como presidente y cofundador del grupo estudiantil conservador Turning Point USA, era considerado un aliado clave del expresidente Donald Trump y figura influyente entre los jóvenes republicanos. Tras el ataque, fue trasladado de emergencia a un hospital, donde horas más tarde se confirmó su muerte.
El asesinato fue captado en video y rápidamente se difundió en redes sociales, mostrando el momento en que el disparo lo alcanzó en el cuello y cómo se desplomó en su asiento. El ataque ha provocado condenas e indignación tanto de líderes demócratas como republicanos, quienes denunciaron el incremento de la violencia política en el país.
De acuerdo con Beau Mason, comisionado del Departamento de Seguridad Pública de Utah, el disparo aparentemente provino de un nido de francotirador instalado en la azotea del campus. Cámaras de seguridad registraron a un individuo vestido completamente de negro, presunto autor del ataque, quien hasta el momento sigue prófugo.
La policía estatal informó que dos hombres fueron detenidos e interrogados tras el asesinato, pero posteriormente liberados al no encontrar vínculos con el tiroteo. Las autoridades mantienen un operativo de búsqueda y una investigación abierta para dar con el responsable.
El caso se da en medio de un periodo de creciente violencia política en Estados Unidos, el más prolongado desde la década de 1970. De acuerdo con reportes de Reuters, se han documentado más de 300 actos violentos de índole política desde el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
Cabe recordar que el propio Donald Trump ha sobrevivido a dos intentos de asesinato en 2024, uno de ellos en julio durante un acto de campaña en el que resultó con un rasguño en la oreja, y otro frustrado meses después por agentes federales.
Mientras tanto, la seguridad se refuerza en Utah y las autoridades insisten en que no descansarán hasta dar con el francotirador responsable del ataque que ha sacudido al país.
