


De la Redacción
El Buen Tono
Orizaba.– Elementos de la Policía Vial, bajo la administración del corrupto alcalde Juan Manuel Diez Francos, despojaron la tarde de ayer de una camioneta particular a una familia que realizaba actividades comerciales en plena vía pública.
De acuerdo con el afectado, quien únicamente buscaba generar ingresos para el sustento de su familia, los oficiales no sólo remitieron su vehículo al corralón, sino que también solicitaron la intervención del área de Comercio del Ayuntamiento, que impuso una multa y advirtió que la unidad no podrá ser liberada hasta el próximo lunes, una vez cubiertas las sanciones y tramitado el permiso correspondiente.
Las multas, hostigamiento constante y trabas administrativas no sólo afectan a quienes buscan ganarse la vida de manera honesta, sino que también muestran un patrón de cobros indebidos y favoritismo hacia intereses particulares, golpeando directamente la economía de los trabajadores más vulnerables.

