Sandra González
El Buen Tono
Orizaba.- La paciencia de los comerciantes del mercado Cerritos llegó al límite. En plena temporada de lluvias deben vender entre charcos y goteras, cubriendo su mercancía con lonas y plásticos improvisados, mientras la administración municipal encabezada por Juan Manuel Diez Francos les exige “a fuerza” una cooperación de 200 pesos para los festejos del próximo 23 de octubre, relacionados a los 15 años de su construcción.
Entre la frustración y la indignación, los locatarios denuncian que desde hace cinco años han solicitado que el ayuntamiento impermeabilice el techo del inmueble, pero la respuesta ha sido siempre la misma, es decir, indiferencia. “Cada temporada de lluvias, es lo mismo, pero esta ha sido la peor, tenemos que convivir con cascadas de agua dentro del mercado. Tenemos que voltear los plásticos para sacar el agua y, aún así, quieren que cooperemos, y no se les olvida cobrarnos por instalarnos aquí”, lamentó uno de los vendedores.
Los afectados aseguraron que la situación no sólo daña sus productos, sino también sus ventas, pues los clientes evitan entrar a una zona que se convierte en un lodazal cuando llueve. “La gente prefiere no venir, y eso nos deja sin ingresos”, expresaron.
En el mercado Cerritos, inaugurado en 2010 sobre los terrenos de la antigua fábrica textil de Cerritos de San Juan, presumen tener su reglamento y cuotas más altas que otros zocos locales.
Sin embargo, la falta de mantenimiento refleja una administración municipal corrupta y más preocupada por las apariencias que por las condiciones dignas de trabajo.
“Pagamos más que en otros mercados, pero ni siquiera nos dan un techo que no se caiga a pedazos”, reprocharon vendedores.
