De la redacción
El Buen Tono
Doha, Qatar.- Afganistán y Pakistán alcanzaron un alto el fuego inmediato en conversaciones mediadas por Qatar y Turquía, luego de una semana marcada por encarnizados enfrentamientos que dejaron decenas de muertos y cientos de heridos. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Qatar informó que ambas naciones celebrarán reuniones de seguimiento en los próximos días para asegurar la sostenibilidad y correcta aplicación de la tregua.
El conflicto surgió después de que Pakistán exigiera a Kabul frenar a milicianos que operaban desde su territorio y que habían intensificado ataques en suelo paquistaní. Los talibanes afganos niegan dar refugio a estos grupos y acusan al Ejército de Pakistán de difundir información falsa y de proteger a militantes vinculados al Estado Islámico, acusaciones que Islamabad rechaza.
Los recientes enfrentamientos generaron preocupación internacional: China pidió proteger a sus ciudadanos e inversiones, Rusia instó a la moderación y el presidente Donald Trump ofreció su ayuda para poner fin al conflicto.
Las tensiones se dieron en paralelo con la visita del ministro de Asuntos Exteriores talibán, Amir Khan Muttaqi, a India, donde ambos países acordaron estrechar lazos diplomáticos: India reabrirá su embajada en Kabul y los talibanes enviarán diplomáticos a Nueva Delhi.
Pakistán sigue siendo la principal fuente de mercancías y alimentos para Afganistán, país empobrecido y sin salida al mar, por lo que la estabilidad en la frontera resulta clave para ambos vecinos.
Los milicianos llevan años luchando contra el Estado paquistaní con el objetivo de imponer su sistema de gobierno islámico, lo que convierte a esta tregua en un paso relevante, aunque frágil, para reducir la violencia en la región.
