De la redacción
El Buen Tono
Córdoba.- Mientras el PAN habla de “renovación”, en Córdoba entrega el control municipal al hijo de la exalcaldesa más señalada por corrupción, Isaac Eduardo Luz López, conocido entre la militancia como “el Bodoque”.
Su madre, Leticia López Landero, dejó un faltante de más de 107 millones de pesos sin comprobar ante el Orfis, además enfrenta una denuncia penal por desviar maquinaria municipal —retroexcavadora, camiones de volteo y camionetas oficiales para construirle una casa a su hijo cuando él fungía como titular del DIF.
Los expedientes siguen abiertos, pero el PAN decidió premiar a los responsables del saqueo con la dirigencia municipal, aun cuando además existe evidencia que en las pasadas elecciones traicionaron al partido al pactar a favor de Morena y el Partido del Trabajo.
“Es el colmo de la desfachatez. El PAN se ha convertido en un refugio para la impunidad”, denunciaron militantes locales, quienes exigen la expulsión de la familia López Landero.
Si el PAN realmente quisiera renovarse, debería empezar por destituir a Leticia López y a su hijo, símbolos de una política basada en el abuso de poder, desvío de recursos y la falta de transparencia.
