Pasó de una modesta casa en Córdoba a una mansión de 6 millones de pesos en Fortín
EL BUEN TONO
Fortín,Ver.- De vivir en una vivienda modesta en el centro de Córdoba, Víctor Vargas Barrientos pasó en pocos años a levantar una residencia valuada en más de 6 millones de pesos en el fraccionamiento Villas de la Llave, en Fortín de las Flores. La casa -con alberca, bar, terrazas y amplias áreas de descanso- no es solo un cambio de domicilio: Es el símbolo visible del salto que da un político cuando cambia la lucha social por el beneficio personal.

Vargas no nació millonario se presentó durante años como maestro de nivel medio superior, trabajador como cualquier otro. La diferencia es que él vio en el Movimiento Magisterial una oportunidad, no una causa. Se envolvió en las consignas, marchó, se tomó la foto y se vendió como defensor del gremio.
Luego vino lo demás: Alianzas, acuerdos, posiciones, acceso al poder. Su cercanía con Zenyazen Escobar García -el mismo que ha sido señalado públicamente por presuntos manejos irregulares dentro de la Secretaría de Educación- fue la llave.
Con ella llegó la diputación, la influencia y el ascenso económico acelerado que hoy se refleja en su nueva casa. Mientras Vargas escalaba, muchos de los maestros que marcharon con él quedaron rezagados. Aquellos que protestaban contra recortes, plazas congeladas y castigos administrativos, hoy ven cómo uno de los suyos terminó viviendo como parte de la élite que decía combatir.

Ex compañeros del movimiento lo dicen claro:“Se sirvió de la lucha, y cuando obtuvo lo que quería, nos dejó atrás”. La memoria del magisterio veracruzano es larga y no olvida a quienes convirtieron la causa en escalera.
Hoy, Vargas intenta posicionarse políticamente en Fortín, hablando otra vez de “cercanía con la gente”, de “valores” y de “compromiso social”. Pero su mansión de 6 millones de pesos dice lo contrario.



