*Monte Blanco y Monte Salas exhiben deterioro mientras surgen versiones de posibles acuerdos para evitar observaciones durante la entrega–recepción.
Efraín Hernández
El Buen Tono
Fortín, Ver.- A cuarenta días de concluir su administración, Gerardo Rosales Victoria enfrenta acusaciones de saqueo, mal manejo de recursos y abandono institucional, mientras los parques municipales de Monte Blanco y Monte Salas muestran daños visibles y proyectos inconclusos. El deterioro evidencia la falta de inversión en servicios públicos, ya que ni Parques y Jardines ni Obras Públicas recibieron recursos suficientes para mantenimiento básico o rehabilitación.
Por un lado, el parque de Monte Blanco presenta infraestructura dañada, áreas sin atención y mobiliario inservible, lo que confirma el rezago acumulado durante la gestión actual. Por otro, en Monte Salas la reestructuración prometida quedó estancada en obra negra, con estructuras incompletas y materiales abandonados, sin avances que respondan a lo anunciado a la población.
En este contexto, el alcalde prepara su informe de labores, previsto para los próximos 15 días, pese a las exigencias ciudadanas que piden claridad sobre el destino del presupuesto y el estado real en que quedarán los espacios públicos.
De forma paralela, trabajadores del ayuntamiento quienes pidieron el anonimato por temor a represalias, reportaron reuniones en cafeterías de Córdoba y Fortín entre el edil saliente y el presidente municipal electo, Alfonso Piccolo Marín, en las que —según versiones internas— se habrían delineado acuerdos para evitar observaciones durante el proceso de entrega–recepción, lo que generó preocupación entre vecinos.

