Sandra González
El Buen Tono
Orizaba.- En un acto que locatarios califican como autoritario, arrogante y cínico, la administradora del mercado Emiliano Zapata, Laura Sánchez Hernández, inició una campaña de recolección de firmas con las que pretende “blindarse” y justificar su permanencia en el cargo. Esto ocurre mientras se presenta públicamente como funcionaria ratificada para la siguiente administración, pese a que no existe ningún proceso formal ni legal que respalde dicha afirmación.
Lejos de atender las denuncias por abuso de poder, despojo de espacios y presuntos negocios ilegales, la funcionaria optó por simular respaldo popular, presionando a comerciantes para que firmen documentos que buscan proyectar una imagen de eficiencia. Esta imagen dista por completo de la realidad que enfrentan los locatarios día a día.
“Ya anda diciendo que va a regresar, que va a repetir y que nadie la va a mover, como si el mercado fuera suyo. Está juntando firmas para hacer una rueda de prensa y decir que todos la apoyamos, cuando eso es completamente falso”, denunció la luchadora social Tomasa López Peralta.
Además, la acusó de intimidar a vendedores del Valle, advirtiéndoles que no se acerquen al movimiento ni a sus representantes, bajo el mensaje velado de que podrían “meterse en problemas”. Esta práctica evidencia el uso del miedo como herramienta de control y sometimiento.
Mientras tanto, la protesta de los locatarios, que ya supera los 15 días consecutivos, es minimizada y ridiculizada por la administradora, quien se burla abiertamente de quienes defienden el espacio de un compañero al que se pretende despojar. El objetivo sería entregar su lugar a una asociación por conveniencia administrativa.
López Peralta señaló que este tipo de acciones no sólo representan corrupción, sino una clara violencia contra ciudadanos que sólo buscan conservar su fuente de trabajo frente al abuso descarado de una funcionaria que opera con impunidad.


