José Juan
El Buen Tono
CÓRDOBA.- Colectivos de madres buscadoras de Córdoba y la región denunciaron que la fiscal Verónica Hernández tiene muchos temas sin resolver, entre ellos, la enorme deuda que generó con las familias, pues —acusan— jamás se compadeció de su situación, nunca impulsó acciones efectivas de búsqueda y únicamente les dio largas mientras los expedientes seguían abandonados.
Integrantes de grupos solicitaron el anonimato por temor a represalias, relatan que fiscalías se volvieron espacios donde han sido tratadas con desprecio, cuestionadas por exigir avances y, en más de una ocasión, hasta amenazadas a través de intermediarios vinculados a la institución. Señalaron que mientras ellas arriesgan la vida recorriendo brechas, cerros y zonas de riesgo para localizar fosas, la autoridad ha sido indiferente.
Las buscadoras explicaron que los expedientes permanecen estancados por años, sin peritajes completos, sin diligencias oportunas y sin acompañamiento real. “Todo es trámite, cita tras cita, promesas vacías… pero no hay resultados. Nos hicieron perder tiempo mientras nuestros hijos seguían desaparecidos”, afirmó una de ellas. También denuncian la manipulación de cifras, la falta de personal especializado y la negativa constante a abrir líneas de investigación, pese a los indicios que presentaban.
Ahora, las familias exigen que se investiguen las irregularidades: parálisis en cientos de carpetas, operativos cancelados sin explicación, intimidación contra quienes protestan, ocultamiento de información y falta de coordinación con colectivos. Aseguran que no buscan confrontación, sino verdad y justicia para demostrar que, estos años, la institución ha estado más ocupada en desalentarlas que en encontrar a sus desaparecidos.


