

Córdoba.- Miles de personas visitan el panteón para despedir a sus difuntos, tras el festín ofrecido en sus hogares, con música, flores y la nostalgia de volver a recibirlos el próximo año, así como los antepasados les han enseñado la tradición mexicana del Día de Muertos.
Aun en la mañana lluviosa la población empezó a llegar a los cementerios de Córdoba, pero fue pasado el mediodía cuando las vialidades se congestionaron por el tráfico y los pasillos de los campos santos se colmaron de gente que cargaba ramos de flores, coronas, velas y comida que compartirían junto a la tumba de su ser querido.
Resguardando la zona, se distribuyeron 200 elementos de diversas corporaciones, como 60 de la Policía municipal, 25 elementos de proximidad y 20 elementos institucionales de caballería, guardia canina, además de 40 agentes viales que mantuvieron controlando la circulación de los automovilistas.
Al haberse interrumpido la circulación en la calle 39, el tránsito fue lento, aunque en algunos puntos hubo alternativos para quienes se dirigían hacia Tapia, Naranjal.
Además hubo un puesto de atención de la Cruz Roja, así como de Protección Civil Regional, la cual estima hubo una afluencia de 20 mil visitantes en los panteones públicos y particulares ubicados en el Palomar.
Al interior de los cementerios se mantuvo el orden con los vigilantes, mientras que en la periferia se vigiló el comercio ambulante que se instaló con permisos del Ayuntamiento.
SofÌa Dorantes Chávez
El Buen Tono
