*Tianguistas denuncian que el alcalde Gerardo Rosales Victoria tolera moches, provoca desorden y permite la invasión total del espacio público.
EL BUEN TONO
Fortín.- La situación en el tianguis del bulevar Córdoba–Fortín llegó a un punto insostenible. Comerciantes formales acusaron que la administración de Gerardo Rosales Victoria abrió la puerta a vendedores ambulantes provenientes de Puebla, quienes operan bajo un esquema de moches para instalarse frente a las naves construidas por los propios tianguistas. Señalaron que esto representa un atropello, pues mientras ellos compraron el terreno y levantaron infraestructura, los informales ahora se adueñaron de las banquetas, los carriles y hasta usan el bulevar como estacionamiento.
Los inconformes afirmaron que el desorden se ha desbordado al grado de provocar accidentes viales a lo largo del año, derivados del caos permitido por el presidente municipal. Indicaron que los ambulantes ya no solo se colocan afuera del tianguis, sino que bloquean la circulación en ambos sentidos, lo que ha generado choques, embotellamientos y riesgos constantes para peatones y motociclistas. Aseguraron que, pese a las evidencias, la autoridad local mantiene la permisividad porque obtiene alrededor de 80 mil pesos por dejar operar a los foráneos.

Los tianguistas recordaron que fueron ellos quienes adquirieron el predio y construyeron sus naves con recursos propios, apostando por un espacio ordenado y en regla. Sin embargo, consideran un golpe directo a su economía que ahora los ambulantes ocupen las áreas que les corresponden, sin pagar permisos formales ni cumplir con normativas municipales.


