AGENCIA
CDMX.- Andrés Manuel López Obrador, respondió prepotente a la pregunta de un reportero sobre la refinería de Cadereyta a su llegada a un hotel en Monterrey, Nuevo León.
En un video compartido por grupo Reforma, a través de las redes sociales de El Norte, se ve a uno de sus reporteros acercarse a AMLO para preguntarle por las emisiones contaminantes de la refinería a lo que el presidente responde con otra pregunta “¿De qué periódico eres tú?”.
La grabación de 30 segundos muestra al presidente López Obrador en la recepción de un hotel. Mientras caminan hacia la zona de elevadores, el reportero le responde al cuestionamiento de en qué medio trabaja, pero AMLO al conocer la respuesta revira con prepotencia y altanería al periodista.
*Periodista (P): ¿qué opinión tiene en relación con las críticas por las emisiones de la refinería?
AMLO: ¿De qué periódico eres tú?
P: Periódico Reforma, periódico El Norte.
AMLO: ¡Ah! Son muy mentirosos ustedes.
En ese momento, un joven se acerca para pedirle una foto a López Obrador, que se detiene para posar a la cámara. Después, AMLO mira nuevamente al reportero y finaliza su respuesta con un “calumniadores y corruptos”.
López Obrador camina, rodeado por cinco personas, hacia los elevadores, pero el reportero no realiza ninguna pregunta más y deja de caminar atrás de él.
El pasado 11 de mayo, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, informó que hoy sábado sostendría una reunión con el presidente López Obrador, con quien visitará la refinería de Pemex en Cadereyta y discutirían los compromisos que tomarían para reducir las emisiones contaminantes.
La reunión forma parte del Plan Maestro del Aire, con el que el gobierno de Nuevo León buscará acordar con las empresas, incluida la refinería, acciones para mejorar la calidad del aire y reducir la contaminación.
Él no sabe responder de otra manera, está claro.
Este es el estilo de un hombre preparado, un estadista, un visionario que no se intimida con nada y por eso es el mejor presidente del mundo.
Es que ya no puede seguir fingiendo lo que nunca fue: un hombre mesurado, honesto, inteligente; sale a relucir su verdadero yo: un hombrecillo frustrado, enojado, violento, rencoroso, corto de intelecto y vocabulario.
El discurso siempre denostando agresivo doloso perverso de estos “chanchos” la realidad de la dictadura salpica a todos, la educación, el encono, el odio, lo criminal de humor en la vida de México y su pueblo.
Pero no estaba enojado. Lo que ocurrió fue simplemente una proyección, se describió tal y como se percibe: mentiroso, calumniador y corrupto. Cuando alguien ofende a otro, el que ofende, tiene problemas. Generalmente vuelca en el otro las cosas que le están incomodando de él.
