

De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- La comunidad parroquial celebra las Bodas de Oro de Rosita Cárdenas Castillo y Justino Barbosa Rosas, una pareja que, con amor, fe y perseverancia, ha construido una familia sólida bajo la bendición de Dios.
Desde hace medio siglo, Rosita y Justino han caminado juntos, superando desafíos y cosechando alegrías. Su unión ha sido fructífera: tienen dos hijos y una hija que hoy los colman de orgullo y felicidad. Pero más allá de su legado familiar, su historia destaca por su profunda espiritualidad y servicio a la comunidad.
Rosita, desde los 12 años, ha llevado una vida dedicada a la fe. Su vocación como catequista en la parroquia San Juan Bosco, de la colonia Paraíso, ha dejado huella en generaciones de niños, a quienes ha guiado con paciencia y devoción. “Enseñar la Palabra de Dios a los pequeños ha sido una de mis mayores alegrías”, comparte con emoción.
Fieles a su espíritu apostólico, la pareja decidió renovar su compromiso esponsal durante la misa dominical dedicada a los niños, en un emotivo acto donde el cariño se hizo presente. Los pequeños, a quienes Rosita tanto ama, fueron testigos de este momento lleno de simbolismo y amor.
Durante la bendición, el padre Jorge Arturo Cisneros Valentín les deseó que su legado de fe y amor siga inspirando a muchas generaciones más.
