Efraín Hernández
El Buen Tono
Córdoba.- Con un desplome cercano al 50 por ciento en la comercialización, un tope de apenas 300 ejemplares vendidos y costos que van de los 100 a los 250 pesos, vendedores de pino navideño encaran el cierre de la temporada con el tiempo encima, a pocos días de abandonar el espacio del mercado La Isla, donde se instalaron desde el 25 de noviembre y prevén permanecer hasta el 25 de diciembre.
La colocación de los árboles se mantiene a pesar de un contexto financiero desfavorable y de la nula ayuda oficial en sus lugares de procedencia. En ese escenario, Natividad, originaria de La Perla, expuso que ante la falta de acompañamiento por parte de la alcaldesa Ruth García Meza, numerosos campesinos se ven forzados a desplazarse a otras demarcaciones para intentar colocar su producción durante el periodo decembrino.
Los ejemplares que se venden en esta ciudad provienen de sembradíos localizados en Ixhuatlancillo, la comunidad de La Sidra, en Santa Ana Atzacan, así como de predios situados en La Perla, dentro de la franja colindante entre Veracruz y Puebla, donde esta labor constituye uno de los principales sustentos económicos para las familias. Frente a un escenario adverso, los comerciantes optaron por mantener tarifas accesibles como estrategia para captar clientes, con la expectativa de que el repunte de consumo en los últimos días de diciembre ayude a compensar las mermas acumuladas en las primeras semanas.
Por último, los productores admitieron que recientemente enfrentaron una infestación que comenzó a secar las plantaciones; no obstante, mediante la aplicación de cal lograron rescatar los árboles, lo que permitió conservar la oferta para este año, aunque persiste la incertidumbre sobre la viabilidad de la actividad en el futuro.
