


Efraín Hernández
El Buen Tono
Fortín.- Ayer, con el intenso calor que se registró, un hombre a bordo de una motocarga se detuvo en el bulevar Córdoba-Fortín, a la altura de Crucero Nacional. Con un letrero que decía: “Cambio por comida”, ofrecía pinos de limón y otras plantas a cambio de alimento o por 50 pesos, con la esperanza de llevar algo a su familia.
Se trata de Ramón Torres, originario de Coscomatepec, quien recorre varios kilómetros en su pequeña unidad con la dignidad intacta. No pedía limosna. Llevaba consigo plantas que cultiva, las cuales intercambiaba por productos básicos o por una cantidad simbólica.
La motocarga, desgastada, es su único medio de transporte.
Con expresión serena y ropa sencilla, se instaló brevemente a un costado de la vía, llamó la atención de quienes transitaban por la zona por el letrero que utilizó, y por su entereza.
En su rostro se notan algunos abscesos visibles entre la frente y la nariz, señal de que su salud podría estar comprometida.
Aun así, nunca se quejó, sólo mostró el deseo de salir adelante.
Con pocas palabras, Ramón explicó su objetivo: obtener algo que llevar a casa, ya sea mediante el trueque o la venta de sus plantas ornamentales.


