


Nayeli Ríos
EL BUEN TONO
Fortín, Ver.- La indignación entre los fortinenses crece tras revelarse que Denia Abril Amaro, quien será regidora por Morena en la próxima administración, fue vista en un conocido antro de Boca del Río en compañía de Gerardo Rosales Victoria y de su media hermana Ericka Hernández, actual secretaria de Presidencia y una de las funcionarias más cuestionadas por su actitud altanera y prepotente dentro del Ayuntamiento.
Mientras el municipio enfrenta una grave crisis por la falta de agua, calles en ruinas, inseguridad y retrasos en pagos a proveedores, el presidente municipal se da el lujo de salir de fiesta acompañado de sus colaboradoras más cercanas, haciendo uso del poder y de los recursos públicos como si se tratara de su propiedad.
Trabajadores del propio Ayuntamiento confirman que esta no es la primera vez que Rosales Victoria acude a antros, bares o restaurantes acompañado de secretarias de confianza. Los excesos, el descaro y el abuso de su posición se han convertido en una constante, dejando en evidencia el verdadero rostro de una administración que se prometió cercana a la gente pero terminó siendo un circo de escándalos, amiguismo y despilfarro.
La presencia de Denia Abril Amaro en este tipo de eventos ha encendido aún más el rechazo popular. Antes de tomar posesión como regidora, ya exhibe los mismos vicios y complicidades del grupo que ha hundido al municipio en el abandono. La ciudadanía lo tiene claro: no se trata de errores, sino de una red de intereses personales que ha hecho del Ayuntamiento un espacio de negocios y placeres privados.

