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Celebra Iglesia Misa Crismal

Superiberia

Orizaba.- Este Martes Santo, el Arzobispo emérito de Xalapa, Monseñor Sergio Obeso Rivera, presidirá la Misa Crismal en donde más de 60 sacerdotes renovarán sus votos.

En la Catedral de San Miguel Arcángel estarán presentes los equipos parroquiales, representantes de todos los decanatos para recibir también el Santo Crisma, Óleo de los enfermos y catecúmenos.

 

La Misa Crismal, presidida por el obispo y concelebrada con los presbíteros de la Diócesis, será a las once de la mañana. Es la celebración en la que se consagra el Santo Crisma (de aquí el nombre de Misa Crismal) y bendice además los  óleos o aceites (para los enfermos y los que se van a bautizar).

 

La palabra crisma proviene del latín chrisma, que significa unción. El crisma es la materia sacramental con la cual son ungidos los nuevos bautizados, son signados los que reciben la confirmación y son ordenados los obispos y sacerdotes, principalmente.

 

La consagración del crisma y la bendición de los otros dos aceites se considera como una de las principales manifestaciones de la plenitud sacerdotal del obispo.

Esta misa se celebra en la catedral de cada diócesis el Jueves Santo; pero, por razones de conveniencia pastoral, se puede adelantar a uno de los días de la Semana Santa; en Orizaba será este Martes Santo.

 

El Santo Crisma, es decir, el óleo perfumado representa al mismo Espíritu Santo, se otorga junto con sus carismas el día que una persona recibe el bautizo, la confirmación y en la ordenación de los sacerdotes y obispos.

 

La materia apta para el sacramento debe ser aceite de oliva. El crisma se elabora con óleo y aromas o materia olorosa.

 

Es conveniente recordar que no es lo mismo el Santo Crisma que el Óleo de los catecúmenos y de los enfermos que sólo son bendecidos, y pueden hacerlo otros ministros en algunos casos.

 

El rito de la Misa Crismal incluye la renovación de las promesas sacerdotales. Tras la homilía, el obispo invita a sus sacerdotes a renovar su consagración y dedicación a Cristo y a la Iglesia. Juntos prometen solemnemente unirse más de cerca a Cristo, ser sus fieles ministros, enseñar y ofrecer el santo sacrificio en su nombre y conducir a otros a Él.

 

Otro tema importante de la Misa Crismal es el sacerdocio. Al entregar el misterio de la eucaristía a la Iglesia, Cristo instituyó también el sacerdocio.

 

Matilde De los Santos Parada

El Buen Tono 

 
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