De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- “Mal, una mala administración”, consideró Javier Ramos Bozziere, secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de la CROC, al evaluar la gestión saliente de Juan Martínez Flores.
Esta declaración pública se produce en un contexto de señalamientos por presuntas negociaciones con el equipo del alcalde electo, Manuel Alonso Cerezo, para mantener privilegios y control dentro del ayuntamiento.
En una entrevista, Ramos Bozziere describió un periodo de cuatro años marcado por el conflicto: “temas de pago, tema de prestación, tema donde… pisaban nuestros derechos”. Sin embargo, esta postura crítica contrasta con información pública que señala su cercanía con la nueva administración.
Diversas publicaciones en redes sociales, atribuidas a medios locales y ciudadanos, lo acusan de haber realizado pactos de cúpula con Cerezo y su operador político, Luis Abella Alvarado, para garantizar la continuidad de su grupo en la nómina municipal.
El líder sindical confirmó que enfrentan dos procesos judiciales derivados de una manifestación del 30 de diciembre del año pasado, donde se presentaron denuncias. Sobre estos casos, declaró que “esa parte la está llevando específicamente los abogados de la Confederación”.
