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Ciudad de México.– La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, denunció un presunto conflicto de interés en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), señalando a un “Ministro con nombre compuesto” que impulsa la devolución, con intereses, de un crédito fiscal pagado por tres grandes contribuyentes al Servicio de Administración Tributaria (SAT), justo cuando él mismo dirigía ese organismo. Aunque Sheinbaum evitó dar el nombre directamente, se refería a Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, exjefe del SAT y actual Ministro de la Corte.
Durante su gestión al frente del SAT —de julio de 2008 a noviembre de 2012, en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa—, Gutiérrez Ortiz Mena condonó 392 mil 498 millones 585 mil 785 pesos a 9 mil 881 grandes contribuyentes, entre personas físicas y morales, de acuerdo con datos de la organización Fundar. Solo 60 de estos beneficiarios fueron exonerados de pagar más de 128 mil millones de pesos.
La mandataria federal expuso que los tres grandes contribuyentes ahora buscan no solo la devolución de los pagos fiscales realizados hace años, sino también que el gobierno les pague intereses, algo que calificó de “ilegal” y muestra de un claro conflicto de interés, dado que quien ahora impulsa la resolución favorable desde la SCJN es el mismo funcionario que encabezaba el SAT cuando se efectuaron dichos pagos.
Sheinbaum añadió:
“Estos contribuyentes pagaron al SAT un crédito fiscal hace muchos años y ahora piden que se les regrese con intereses. ¿Quién quiere que se les devuelva? El mismo que estaba en el SAT cuando pagaron. Eso es, para empezar, un conflicto de interés. Y segundo, es ilegal”.
Las cifras de condonaciones anuales revelan la magnitud de la política fiscal de indulgencia durante su gestión:
- 2007: 57 mil 585 millones de pesos
- 2008: 37 mil 773 millones
- 2009: 73 mil 961 millones
- 2010: 80 mil 026 millones
- 2011: 115 mil 946 millones
- 2012: 84 mil 791 millones
Además, el expresidente Felipe Calderón lo propuso como jefe del SAT en 2008, y en noviembre de 2012 lo promovió a la SCJN, donde ahora ocupa el cargo de Ministro.
Tanto Sheinbaum como el expresidente Andrés Manuel López Obrador han cuestionado públicamente el papel del Ministro en la recaudación fiscal de los grandes contribuyentes y el auge de las llamadas “factureras” durante su paso por el SAT.
La polémica también incluye una respuesta sarcástica que el Ministro habría dado en una intervención reciente, donde, entre risas del público, hizo una burla sobre los requisitos para integrar la Corte. Sheinbaum respondió con firmeza:
“Nadie se burla de los mexicanos. El pueblo decidió, y me toca defender a México. Será muy reconocida la escuela de Harvard, pero sería bueno que investigara la corrupción en el Poder Judicial”.
El caso pone nuevamente en el centro del debate la transparencia, la rendición de cuentas y la independencia del Poder Judicial en México, especialmente en lo que respecta al vínculo entre las élites fiscales y las decisiones de la Suprema Corte.
