

AGENCIA
Cuernavaca, Morelos.– En una sesión ordinaria que concluyó en la madrugada, el Congreso del Estado de Morelos aprobó por mayoría tres dictámenes que han generado fuerte rechazo de colectivos feministas y organizaciones civiles: el aumento de 20 a 30 diputaciones locales, la limitación de la paridad de género en municipios y la extinción del Instituto de la Mujer.
La sesión estuvo marcada por consignas como “Congreso machista”, “diputadas traidoras” y “Terrazas machista, te tenemos en la lista”, lanzadas por manifestantes que se congregaron en las gradas del recinto legislativo. Entre ellas, mujeres, integrantes de la comunidad LGBTIQ+ y activistas que defendieron los derechos políticos de las mujeres.
Además, se denunció la presencia de un presunto grupo de choque que intentó acallar las protestas feministas con gritos de “shhh” y exigencias de silencio, especialmente dirigidas a las manifestantes que interpelaban al diputado panista Daniel Martínez Terrazas y a la morenista Brenda Espinoza López.
Reformas aprobadas
El primer dictamen aprobado con 17 votos a favor y uno en contra, reforma el artículo 24 de la Constitución local y adiciona el 14 Bis del Código Electoral, incrementando de 20 a 30 las diputaciones locales (18 por mayoría relativa y 12 por representación proporcional). Este será remitido al Constituyente Permanente.
El segundo dictamen modifica el artículo 14 Bis para cumplir con una sentencia que obliga a reservar 21 municipios para candidaturas de mujeres. Sin embargo, la propuesta encabezada por Terrazas solo contempla 11 municipios y excluye a Cuernavaca, Xochitepec, Cuautla y Yecapixtla, lo que provocó nuevas protestas.
Finalmente, se aprobó la derogación del artículo 23-D, lo que implica la desaparición del Instituto de la Mujer. La votación fue de 16 votos a favor y 4 en contra. Durante este punto, las gradas estallaron en gritos de “¡traidoras!” y “¡diputados machistas!”.
Reacciones de diputadas y activistas
Las diputadas Andrea Gordillo (PAN), Tania Valentina Rodríguez (PT), Gonzala Eleonor Martínez (Morena) y Luz Dary Quevedo (MC) se opusieron a la extinción del Instituto. Gordillo denunció acuerdos políticos hechos en lo oscuro:
“Los derechos de las mujeres no se negocian. Necesitamos instituciones fuertes. Eliminar el Instituto es poner en riesgo nuestras vidas”.
Por su parte, Quevedo recordó que el Instituto no es solo una persona, sino un espacio para cerrar brechas de género, mientras que Espinoza defendió la reforma bajo el argumento de “transversalizar la perspectiva de género”, lo que le valió abucheos.
La abogada feminista Perla Pedroza calificó la sesión como “el cinismo más grande” y denunció violencia institucional:
“Contrataron gente para callar a las mujeres y violentar nuestros derechos. Nos están borrando”.
Micaela Bocanegra, exdirectora de COEVIM, sentenció:
“Fue una noche negra para los derechos de las mujeres. El Congreso ha cerrado las puertas a las voces feministas y desmantelado una conquista histórica”.
Acciones legales en camino
Diversas organizaciones civiles anunciaron que emprenderán acciones legales y políticas para revertir las reformas, denunciando que responden a intereses partidistas y directrices federales impuestas sin diálogo.
La jornada legislativa del Congreso de Morelos ha dejado un profundo malestar en el movimiento feminista, que advierte un retroceso grave en los derechos y la representación política de las mujeres en la entidad.
