

Fortín.- En un salón de la escuela Benito Juárez de la congregación de Santa Martina se aplicó concreto para su rehabilitación, sin que el terreno sea propiedad de la institución, pues es de un particular.
Lo anterior va en contra de la normatividad y podría generar una obervación del ORFIS o, en su caso, hasta una denuncia penal por uso indebido de recursos públicos.
El alcalde Armel Cid de León acudió este lunes a entregar un salón de clases en la escuela primaria comunitaria de Comisión Nacional de Fomento a la Educación (Conafe) de Santa Martina, donde los alumnos estudian sin pupitres, sin sillas y en un solo salón.
En dicha escuela, donde los 42 alumnos comparten un mismo salón, el Ayuntamiento se encargó de gestionar el material y los padres de familia pusieron la mano de obra, comprometiéndose el alcalde a entregar mobiliario y hacer mejoras a la escuela, pues está construida con bambú, cartón, madera y lámina.
Cabe mencionar que los padres de familia pusieron la mano de obra, pero el material con la que se hizo fue utilizado en un terreno que actualmente está intestado, pero cuyo propietario final es un particular.
Padres de familia esperan que el alcalde cumpla con su palabra para que la institución se haga de un terreno propio, de preferencia en esta misma ubicación para que la obra de piso de concreto del salón no se pierda.
Mauricio L·inez V·zquez
El Buen Tono
