


De la Redacción
El Buen Tono
Coscomatepec.- A tres meses de dejar el cargo, el alcalde, José Luis Alonso Juárez “Faroles”, reafirmó que la salud y la dignidad de los habitantes nunca estuvieron en su lista de prioridades, denunciaron ambientalistas.
Prueba de ello, añadieron, es la avenida Juan Aldama, que se convirtió en un foco de contaminación por el colapso del drenaje que, desde hace meses, inunda de aguas negras calles y viviendas.
Refirieron que el problema pudo haberse solucionado desde el inicio de su administración, con una inversión mínima en infraestructura básica.
Pero el alcalde prefirió destinar recursos a fiestas, camionetas y gastos superfluos, por lo que dejó a las personas expuestas a diario la pestilencia, moscos y riesgos sanitarios.
Dijeron que las alcantarillas se reventaron y el olor putrefacto invade las viviendas.
Mientras tanto, Alonso Juárez guarda silencio, como si el hecho de que ya casi se va lo eximiera de atender el desastre ambiental que dejará detrás.
Para colmo, la calle está llena de baches y tráfico pesado, un cóctel perfecto de contaminación y peligro que exhibe la omisión del ayuntamiento, que también es corrupción.
Los colonos, hicieron notar que pagan impuestos, por lo que exigieron soluciones, pero el alcalde prefiere dejar que Coscomatepec termine hundido en su suciedad.
“Lo peor es que al secarse el agua del drenaje, los desechos se evaporan y terminan afectando casas y comercios de comida, poniendo en riesgo la salud de todos”, dijeron.

