


Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba, Ver.- La imagen del Palacio Municipal de Córdoba se ha convertido en un emblema del abandono que vive la ciudad. A solo meses de que concluya la administración del alcalde Juan Martínez Flores, la maleza crece de manera visible incluso en la fachada principal, una prueba de la omisión que ha caracterizado a su gobierno.
Esta fachada, cuya pintura tuvo una inversión que superó el millón y medio de pesos en trabajos realizados en junio de 2024 y una posterior intervención mínima en marzo de 2025 para reparar daños, hoy se ve opacada por el descuido y la falta de mantenimiento.
Este deterioro en el corazón cívico no es un caso aislado, sino que refleja la situación en toda la ciudad. Las recientes lluvias han dejado al descubierto un panorama desolador de baches y socavones que se multiplican en las calles, haciendo intransitable buena parte de la red vial.

