

España.- El Real Madrid ganó 2-1 al Juventus en un encuentro marcado por el empuje de Cristiano Ronaldo, autor de los dos goles madridistas, y por la falta de identidad de los blancos, que no encontraron el rumbo ante un equipo que acusó la expulsión de Giorgio Chiellini por roja directa en los primeros minutos de la segunda parte.
Aquel Real Madrid que sacó un notable ante el Málaga cuatro días antes en la Liga desapareció casi por completo contra el cuadro italiano. Tal vez los cambios de Carlo Ancelotti restaron prestaciones a un conjunto al que le cuesta dominar el juego. Parece que la transición del equipo de los contragolpes de Mourinho a un Real Madrid de control va a ser complicada.
Sin el balón y con Andrea Pirlo enfrente, un jugador que cuando deje el futbol se le echará de menos, el Madrid jugó sin rumbo durante el primer acto. Todo lo contrario que el Juventus, que con su metrónomo todavía con gasolina, dejó sin argumentos futbolísticos al conjunto madridista.
Y eso tal vez ocurrió por culpa de Pirlo, uno de los mejores en su puesto aunque su carrera se vaya apagando poco a poco. Aún así, verle jugar es todo un placer.
Antes de que se desatara la catarata dominadora del Juventus, Sami Khedira, Ángel Di María y el delantero portugués conectaron en el minuto tres para que Cristiano marcara el primero. Fue un tanto balsámico por lo que le esperaba al Real Madrid.
Al final, acertó Fernando Llorente, titular por fin en un partido de entidad con su nuevo equipo. Hizo el gol italiano al rematar un rechace de Casillas a disparo de Paul Pogba.
Con ese tanto el Real Madrid parecía condenado. El dominio del Juventus era aplastante, pero una acción absurda de Chiellini, que arrastró como un saco de patatas a Sergio Ramos, regaló a los blancos un penalti que transformó Cristiano. El portugués no tuvo piedad y adelantó a su equipo, que en la reanudación aplaudió la expulsión del central italiano por roja directa.
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