AGENCIA
Guadalajara.- La delegada de la Secretaría del Bienestar del gobierno de Alejandro Armenta Mier, Anallely López Hernández, fue señalada por su presunta relación con Nazario Ramírez, identificado por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana como operador del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), tras encontrarse en el mismo domicilio donde éste fue detenido en Guadalajara, Jalisco.
De acuerdo con la carpeta de investigación FED/FEMDO/FEIDCS-JAL/000000975/2025, revelada por el portal e-Consulta, la detención de Ramírez ocurrió durante un cateo en una vivienda de la calle San Gabriel No. 2965, colonia Jardines del Bosque. En el operativo, elementos federales aseguraron armas, cartuchos, un kilogramo y 170 dosis de metanfetamina. En el inmueble también se encontraban cinco mujeres y un bebé de 10 meses, entre ellas la funcionaria poblana.

López Hernández, actual delegada del Bienestar en la región 8 de Libres, habría sido liberada en el sitio tras acreditarse su identidad, pero su presencia en el lugar ha desatado una fuerte polémica en el gobierno estatal.
Medios locales ya habían documentado la cercanía entre López Hernández y Nazario Ramírez, quien en Puebla se presentaba como empresario y en Jalisco fungía como dirigente transportista de la CTM. Fotografías difundidas en redes sociales mostraban a ambos en eventos y viajes, además de los lujosos obsequios que la funcionaria presumía en sus cuentas personales, como una camioneta Jeep Wrangler con placas de Jalisco.
Tras la captura de Ramírez, la delegada desapareció de la vida pública hasta reaparecer en una reunión con Laura Artemisa García Chávez, nueva titular de la Secretaría del Bienestar estatal.
Olga Lucía Romero Garci-Crespo, dirigente estatal de Morena, defendió a la funcionaria asegurando que no existe denuncia formal en su contra y calificó las acusaciones como “ataques de la oposición”.
Nazario Ramírez mantenía vínculos con figuras políticas tanto de Puebla como de Jalisco, incluyendo al gobernador Alejandro Armenta y al mandatario jalisciense Pablo Lemus, con quienes fue fotografiado. También participó en actos públicos de Morena y realizó donaciones a la campaña social “Lechetón”.
El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, confirmó que Nazario Ramírez era identificado como operador de un grupo delictivo relacionado con actividades de extorsión y tráfico de drogas en ambas entidades.
La presencia de una funcionaria estatal en el entorno inmediato de un presunto integrante del CJNG pone en entredicho los filtros de seguridad del gobierno poblano y vuelve a encender las alertas sobre la infiltración del crimen organizado en las estructuras públicas.
Esto ya no se puede llamar gobierno por ningún lado o al memos no uno que deba existir en pleno siglo XXI. El cinismo de todos los días… ¡Pero las pruebas son falsas cuando es de Morena!



