De la Redacción
EL BUEN TONO
Córdoba, Ver.- La emergencia en Infonavit Santa Margarita, lejos de resolverse, se ha transformado en un laberinto de descoordinación y promesas incumplidas que mantiene a las familias en un limbo de incertidumbre.
Una semana después de que se reportó el riesgo inminente por un deslave y la inclinación de un gran árbol de mango, la respuesta municipal se ha reducido a visitas protocolarias y diagnósticos repetitivos, mientras las áreas involucradas parecen operar en compartimentos estancos, sin un plan de acción concreto.
Vecinos de la colonia El Mirador, que colinda con el Infonavit Santa Margarita, que ya han tenido que abandonar sus hogares ante el peligro latente, denuncian una total falta de comunicación entre dependencias como Ecología y Parques y Jardines. Un residente, quien prefirió mantener su nombre en reserva, señaló que tras acudir a las instancias municipales, la respuesta fue un decepcionante “no saber nada”.
La versión oficial, encabezada por el coordinador de Protección Civil, Jorge Trees Martínez, insiste en un “monitoreo constante” y recuerda notificaciones del año pasado. Sin embargo las familias siguen en sus casas, el árbol sigue inclinado, y la única solución ofrecida, según los reportes de esta mañana, es “checar otra vista del árbol”. Mientras la autoridad se limita a observar, el peligro crece con cada lluvia.
Otro punto crítico es la opción del albergue. Las autoridades presumen el Gimnasio El Mexicano como un espacio “acondicionado”, pero los testimonios de los afectados pintan un cuadro muy distinto. La negativa de las familias a trasladarse no es caprichosa; obedece a las pésimas condiciones del lugar, donde, según los vecinos, los baños no funcionan. Ofrecer un refugio en tal estado no es una solución, es una ofensa. La administración municipal no solo falla en prevenir la emergencia, sino que es incapaz de gestionar dignamente sus consecuencias.
