in ,

Deuda pública se acelera con Sheinbaum y supera el ritmo del inicio del sexenio de AMLO

PUBLICIDAD publicidad PUBLICIDAD

AGENCIA

CDMX.- El arranque del gobierno de Claudia Sheinbaum ha estado marcado por un crecimiento acelerado de la deuda pública, que no solo supera el monto heredado, sino que también avanza a un ritmo considerablemente mayor al registrado en el inicio de la administración de Andrés Manuel López Obrador, de acuerdo con cifras oficiales de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Según el informe mensual más reciente de Hacienda, correspondiente a noviembre de 2025, el saldo de la deuda del país pasó de 16.803 billones de pesos en octubre de 2024, cuando Sheinbaum asumió la Presidencia, a 18.261 billones de pesos en noviembre de este año. En poco más de doce meses, el endeudamiento aumentó en 1.458 billones de pesos, lo que representa un crecimiento nominal de 8.68 por ciento (%).

El dato contrasta de manera directa con el discurso de continuidad y prudencia fiscal que ha acompañado a la nueva administración. Más aún, evidencia que el manejo de la deuda en este primer tramo de gobierno ha sido significativamente más agresivo que el observado al inicio del sexenio anterior.

Durante el primer año de AMLO, la dinámica fue sustancialmente distinta. De acuerdo con los mismos registros de la SHCP, entre diciembre de 2018 y noviembre de 2019, el saldo de la deuda federal pasó de 10.551 billones de pesos a 10.754 billones de pesos, un incremento de apenas 0.203 billones de pesos.

En términos nominales, el aumento inicial bajo la administración de López Obrador fue de 1.92%, muy por debajo del crecimiento registrado en el primer año del gobierno de Sheinbaum. La comparación deja al descubierto una diferencia clara en la velocidad del endeudamiento y plantea interrogantes sobre la sostenibilidad de la estrategia fiscal actual.

Aunque Hacienda no ha presentado una explicación detallada sobre las razones del repunte, el aumento acelerado de la deuda ocurre en un contexto de mayores presiones presupuestales, compromisos heredados y una economía que no muestra un crecimiento suficiente para compensar el ritmo del endeudamiento.

El contraste entre ambos arranques de sexenio debilita el argumento de continuidad responsable y abre un flanco crítico para el nuevo gobierno: el de justificar por qué, en tan poco tiempo, la deuda pública creció más y más rápido que en el inicio del proyecto político que dice representar.

CANAL OFICIAL PUBLICIDAD

Productores de Chiapas crean trampa artesanal para combatir el gusano barrenador en el ganado

Camioneta embiste motocicleta en Tuxtepec; Conductores huyeron del lugar